Deja crecer tu imaginación

Deja crecer tu imaginación

martes, 24 de julio de 2012

Un día en la pisci da para mucho,

Desde mayo sin escribir una palabra, me estoy volviendo vaga lo reconozco.

Ayer en la piscina me di cuenta de lo bien que se puede estar sin el móvil, el portátil o el libro electrónico.

Yo como una valiente me fui sin ninguna de las 3 cosas. Me llevé un libro de los de verdad, con su lomo, portada, hojitas, vamos de los de toda la vida y no eché de menos ni por un segundo el resto de aparatitos.

Cuando me cansaba de leer, me dedicaba a cotillear (discretamente) a la gente que tenía alrededor. Con las niñas zambullidas en el agua el 98% del tiempo, solo tenía que tumbarme y mirar.

La piscina bastante desierta, se ve que los lunes la gente no tiene muchas ganas de nada, pero jubilados a montones, parecía el Inserso y muy, pero que muy interesantes de observar.

Van por separado no quedan con otros, pero una vez entran tienen siempre el mismo punto de encuentro y hala allí todos a mogollón, matrimonios, viudo/as, lo más alucinante son sus conversaciones. Yo pensaba que a ciertas edades y sobre todo determinadas generaciones tenían muchos temas tabú, pero no...

Mientras que una señora de unos setenta y muchos años se bajaba el bañador para tomar el sol, su marido le decía al de al lado:

- Ya ves a la vejez viruelas- riéndose tan campante.

-Si, la mía igual, nueve años de noviazgo y como mucho un besito y ahora despendoladas- dice el otro.

Después del shock inicial, no podía parar de reírme, estos viejos son la leche y yo que creía que solo se dedicaban a jugar al dominó ellos y a ver telenovelas ellas, joder que liberales, porque yo personalmente no hago top-less estando con amigos ni loca vaya.

Sus conversaciones variaban de un tema a otro, pero fíjate si son avispadas que sobre las 2 de la tarde, empezaron a hablar de alguien, que por lo visto había llegado ya a la pisci hacía un rato.

Total que ya con mas curiosidad que un gato, me puse a recorrer la piscina con la mirada. Bien de lo que estaban todas hablando era de un tío impresionante, con un traje de neopreno que por lo visto, según me enteré por las dulces ancianitas, va todos los días a la piscina a entrenarse y allí ya estábamos todas, las abuelitas y yo pendientes del chulazo.

-Mira, mira ya ha terminado y ahora se quita el buzo (jaja) y se pone un bañador ajustado y pequeñito- joder con las tías le tienen superfichado al pobre.

Bueno, comentarios de todo tipo cuando ocurrió lo que ya habían dicho, la verdad que el chico estaba pero que muy bien, pero, vamos que no se cortaron un pelo, cuando se acercó al banco a estirar el neopreno para que se fuese secando.

-Hola majo, ya has nadado suficiente por hoy no?-

-Buenas tardes señoras, si ya he nadado un rato- el chico super amable.

-Ay majo que cada día estás más guapo-,-A nuestra edad ya... pero claro en nuestros tiempos no había mozos tan guapos-

A todo esto claro, mi café con hielo se me fue por otro sitio de la impresión,
!que le estaban tirando los trastos!, vamos ni yo en mis mejores tiempos, ostras con las abuelitas.

-¿ A que si hija, a qué es muy buen mozo?- me dicen mirándome a mí.

Madre mía creía que me moría allí mismo, no sabía ni que decir y el tío muerto de la risa y yo colorada ya de por si por el sol, sentía que se me iban y se me venían los colores.

-Hija!!, no te pongas colorá que si tenemos ojos en la cara es para mirar, es muy guapo ý muy educado, Chelo quiere presentárselo a su nieta, pero ya le he dicho yo que no, que la mía es más guapa-, -A que si majo-.

El tío se lo estaba pasando bomba y para rematar la faena aparecen los maridos de las chicas de oro.

-Qué pasa chaval, ya te están liando esta panda de viejas gallinas-, -Tu ni caso, que son muy pesaaas y se aburren mucho-

-Y no las des tanto cuartelillo, que el día menos pensado te llevan a merendar con ellas y entonces estás perdido-

Ya me estaba imaginando yo el cuadro, este Adonis en la cafetería del barrio, rodeado de abuelas, comiendo tortitas y enseñándole fotos de las nietas.

El chico estuvo un rato más dándoles palique y se largó, los abuelos pasada una hora también.

Así que acabado el show, me fui a dar un bañito con las niñas y al volver tenía en el sitio que habían dejado los de la tercera edad, a dos tíos de unos (según su aspecto para mí), cuarenta y muchos muy mal llevados.

Pues no, me equivoqué, cuando se pusieron a hablar, resulta que eran unos 40-42 años, vamos mi edad. Madre mía como se puede estropear un cuerpo de esa manera, vale que yo no soy una top-model, pero lo de estos tíos tenía que estar penado por la ley.

Pero lo más fuerte era la conversación, según ellos las mujeres de hoy en día somos poco menos que unas zorras despiadadas, que no sabemos apreciar a un buen tío como ellos cuando lo tenemos y que claro como con 40 años estamos amargadas, nos dedicamos a tontear y calentar a tíos que están hinchados de tanto gym y que son todos gays.

Resulta que los dos estaban divorciados y sus mujeres estaban por ahí con otros tíos a los que la barriga no les rozaba las rodillas y sus temas de conversación eran más interesantes que la liga de fútbol de la regional B.

Vaya dos frustados y encima salidos, no dejaban pasar una tía sin opinar, daba igual que tuviese 18 que 30, eso si sin dejar la cerveza ni un solo momento.

Al cabo de un rato se fueron a otra parte de la piscina, para ver que pillaban, los muy cretinos. Si las que están allí son un poco listas y no pertenecen a la ONCE, lo mínimo que podéis pillar es un rodillazo en los huevos mamones, pensé yo para mí.

Vuelta a mi libro, pero por poco tiempo, paseillo de los socorristas, para que les vean bien todas las crías de la piscina, porque lo que es controlar el agua y los bañistas poco, a menos que tengas menos de 24 años y estés muy buena, si te da un calambre en la piscina olímpica date por jodida, ahí se acaba tu corta vida.

Todos rapaditos con los pantaloncitos rojos (cuanto daño hizo la serie de los Vigilantes de la playa por diooooos),morenazos, musculitos de gym y digo musculitos porque el más mayor no debía pasar de los 22 añitos y lo más alucinante el Iphone en la mano con música electrónica a todo trapo, se ve que con la crisis han retirado el famoso hilo musical y les dejan a estos niñatos el tema de amenizar el cotarro.

Paseito para acá, paseito para allá, miraditas, sonrisitas y hala media docena de niñas alrededor del columpio que utilizan para vigilar.Increíble, controla más el agua el vigilante jurado que ellos.

Bueno a mi después del día piscinero, hay una cosa que me ha quedado clarísima, el mundo gira a cualquier edad, única y exclusivamente alrededor del sexo, es inconscientemente, pero hay está, todo dios pensando en lo mismo.

Hasta a mis hijas se les van los ojillos detrás de cualquier socorrista que no tenga pecho tabla, eso si cada vez las generaciones son más exigentes, tiene que ser guapos de morirse, con cuerpecitos esculturales, depiladitos totalmente y con sonrisas perfectas.

Pobres, pues no se van a llevar decepciones, porque viendo el panorama o son unos niñatos con Iphone o unos reprimidos con barriga.

Yo de todos modos voy a seguir yendo a la pisci sin mis aparatitos  electrónicos y seguir observando la flora y fauna autóctona del barrio, todo un ecosistema oye.